Convencidos que estamos aquí porque el Espíritu
lo quiere e insiste en ello, celebremos esta fiesta con sus elegidos, a ver si
nos contagiamos de ellos para construir la comunidad.
Este año, los que lo deseen pueden acercarles
esta narración con mímicas. Para ello vamos a necesitar:
·
unos 4 jóvenes o adolescentes que vayan
haciendo la mímica del grupo de amigos.
·
El relator o relatora, que lea pausadamente y
que sepa narrar. Deberá hacer espacios de silencio para que se desarrollen los
movimientos.
·
Un personaje que haga del Espíritu Santo, con
capa roja y que puede venir acompañado de llamas de fuego. Este personaje
tendrá una tijeras enormes para cortar las redes.
·
Elementos: mucha soga para hacer un gran
enredo.
·
Celulares, controles de play, tablets, etc
·
Un corazón enorme, y siluetas de ojos, manos,
orejas, boca, pies, (puede ser un
castillo)
·
Música: ruido de objetos electrónicos y
jueguitos, ruido de confusión, música suave para la narración.
·
(podría hacerse medio un descontrol, pero
estaría bueno llevar lana o piolín y enredarse en cada banco)
Había una vez un grupo de amigos que se
conocían desde hacía unos años en el
colegio. Sabían sus nombres, conocían sus gustos, se amigaban, se peleaban,
jugaban y de divertían.
Aunque de a poco, y también rápidamente, sus juegos se volvieron diferentes,
jugaban de lado, y sin mirarse, con la Tablet, el celu, la play. Sí, podían
jugar de lado y hasta de espaldas.
Podían jugar horas mirando sólo hacia adelante,
tal es así que alguno se había ido y no se daban cuenta.
O peor , alguien estaba triste y no se daban
cuenta, alguien estaba muy feliz y no podía ni decirlo porque a nadie le
interesaba.
Por suerte supieron que su amistad así corría
peligro y decidieron comunicarse, pero
sucedió que entonces más que juntos se sentían amontonados, por qué no
lograban comunicarse.
¿Qué había pasado? Parece que quedaron
atrapados en las redes… Sí sí, como les digo, había comenzado con los mails,
que yahoo, que Gmail, que Hotmail
(esto último se lee lentamente y a medida que
se va mencionando una red se van presentando sogas que los van atando) cuando
abandonaron esa antigüedad, comenzó Facebook, luego twiter, instagran, mensaje
de texto, whatsapp………(agregar todos los que yo no conozco).
Cuando se dieron cuenta vieron que quedaron
totalmente EN RED ADOS. (los chicos se caen al piso, se revuelcan , se
incorporan, bien visibles , y hacen gestos desesperados por desarmarse).
Y esto, amigos míos no pasa sólo en este
momento, en este siglo, siempre hubo redes que atrapaban a las personas, la red
del egoísmo y del individualismo, qué me importan los demás.
La pregunta es cómo salir de allí y seguir
estando juntos pero no enredados ni amontonados.
La respuesta es siempre la misma: hay alguien
capaz de romper esas redes y liberarnos, de devolvernos los sentidos para que
podamos vernos, escucharnos, entendernos, conocernos para luego amarnos.
Y ¿quién es? No lo vemos pero está en todas
partes Es como un bombero, pero que además de agua echa fuego, es como un
superhéroe, con los poderes del universo. Como un constructor de castillos.
Y si yo lo dibujara haría algo así: (entra como un superhéroe vestido de rojo con una
capa y una gran tijera empezando a cortar las redes y poniendo a los chicos de
la mano formando una ronda) (esto lo hace lentamente mientras se lee lo que
sigue)
No lo inventó nadie, viene del Padre y del
Hijo, lo mandaron ellos, para que haga un castillo en nuestro corazón y viva
allí. Y allí empezó a trabajar, nos dio sentidos nuevos: nos abrió ojos en el
corazón para que veamos con poderes extraordinarios lo que le pasa a los demás,
nos puso oídos del corazón para que escuchemos como canta la creación, cómo me
quiere mi familia, cuánto me necesitan mis amigos y también los que no lo son,
pero sobre todo oídos para escuchar a Dios.
Y nos dio manos nuevas, invisibles, para
acariciar el dolor de los que sufren, y dar al que no tiene, porque nos mostró
que lo que me sobra a mí, a otro le falta y nos llenó de fe, esperanza y
caridad, y cuando ya parecía estar todo, puso en el corazón una nueva boca
capaz de hablar con Dios y decirle cuánto lo queremos, y contarle eso a todo el
mundo para hacerlos felices.
Y pies nuevos, que no se cansan nunca de
caminar y contagiar ese amor.
(CUANDO
SE VA DICIENDO TODO ESTO SE VAN PONIENDO CON CINTA O CON VELCRO EN UN CORAZÓN
INMENSO, UNOS OJOS, UNA OREJA, UNAS MANOS, UNA
BOCA, UNOS PIES)
No
dije cómo se llama, claro, adivinaron Espíritu Santo, es que vino un día como
hoy y cortó todas las redes que ataban de miedo a los apóstoles y discípulos en
el día de Pentecostés.
Y
cuando dejamos que el Espíritu haga su trabajo no hay redes, hay lazos, hay
puentes, hay abrazos, amor y alegría y manos que se atan para trasmitir su
amor.
ENTONCES,
AHORA: LOS QUE QUIEREN RECIBIR ESE PODER
Y HACER DEL CORAZÓN UN CASTILLO DONDE EL ESPÍRITU SANTO VIVA Y HAGA MARAVILLAS
NOS DAMOS LAS MANOS…
Y
se lo pedimos al Espíritu Santo diciendo:
(como estamos de la mano
, uno dice y los chicos repiten)
Querido
Jesús
te
queremos mucho
danos
un corazón
igualito
al tuyo.
Un
corazón que te escuche
Y
escuche a los demás.
Que
siguiendo tus latidos
nos haga caminar.
Un
corazón grande,
lleno
de alegría,
donde
entren todos
con
Vos y con María.