Encuentro 1
Espíritu Santo, queremos
encontrarnos y anunciar la Buena Noticia.
“Mientras tanto, los que se habían dispersado
anunciaban la Palabra en los lugares por donde pasaban”.
Hech 8, 4
Seguimos caminando en tiempos de Sínodo, acercándonos
a la fiesta
de Pentecostés queremos avanzar en este
camino, y encontrarnos para
seguir
escuchando la voz del Espíritu y ahora anunciarla.
El día de Pentecostés, cuando los Apóstoles
y la Virgen María estaban reunidos
en el Cenáculo, El Espíritu Santo se hizo
presente como lenguas de fuego y los que estaban reunidos empezaron a hablar en
diferentes lenguas, escucharon hablar de Dios en sus propias lenguas, haciéndose
posible que pudieran entenderse. Y a partir de ese día, los discípulos de Jesús
empezaron a misionar en diversas partes del mundo, llevando la Buena Noticia
del Reino de Dios.
Pero…
¿qué queremos anunciar? La voz de Dios que nos habla al
corazón, las maravillas de la Creación, el Evangelio de Jesús.
¿Y a
quiénes vamos a llevar nuestro anuncio? A
nuestras familias, a nuestros amigos, a nuestros vecinos, a la Comunidad
entera, ¡al mundo entero!
¡Y
cómo vamos a hacerlo? Para que nuestro anuncio se escuche
en el mundo entero pondremos manos a la obra fabricando un megáfono de cartón o
cartulina, también se podrá hacer con botellas de plástico descartables.
¿Qué
vamos a necesitar?
Cartulina o cartón.
Tijera.
Marcador.
Pegamento o cinta.
Papel de diario.
Opción 2: botella plástica
descartable.
¿Cómo lo hacemos?
Formamos un cono de cartón o cartulina,
podremos hacerlo alrededor de un tubo de cartón de los de rollo de papel,
unimos con adhesivo o cinta, decidimos el alto que queremos darle, marcando con
marcador cortamos la parte superior que va a la boca y la parte inferior.
Podemos decorarlo, y si queremos que sea más resistente podremos forrarlo
haciendo cartapesta. Lo podemos forrar con papeles de diario mojados en media
parte de adhesivo blanco mezclado en media parte de agua. Iremos cubriendo todo
nuestro cono, lo dejamos secar y luego se puede pintar con temperas o
acrílicos, y decorar.
También podremos hacerlo con una botella
plástica descartable, cortando su parte inferior.
Una vez que tenemos nuestros megáfonos salimos
a anunciar. Podemos hacerlo en nuestra comunidad y también ante nuestros
vecinos dando una vuelta por el barrio. Con nuestros megáfonos y la Palabra de
Dios que quiere salir de nuestros corazones nos encontraremos en la fiesta de
Pentecostés, para decir juntos:
¡Ven, Espíritu Santo y llena nuestros corazones con tu amor!”
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