“Espíritu Santo, queremos
encontrarnos”…
Con este lema nos
preparamos para celebrar Pentecostés en cada Decanato de nuestra Arquidiócesis.
Y qué mejor manera de “encontrarnos” que comenzando a preparar juntos esta gran
fiesta, unidos en la oración. Por eso les hacemos estas propuestas para rezar
al inicio de la jornada escolar…
Para acompañar el tiempo del sínodo y pedir al Espíritu la capacidad
para encontrarnos, vamos a ir rezando y meditando, cada día, la oración para niños del
Sínodo Arquidiocesano. Podemos tener la oración en un afiche o cartel grande…y
día a día, a medida que meditamos cada parte, le agregamos una imagen alusiva…
¡Qué lindo el corazón
de Jesús! Tan lleno de cosas buenas… su corazón tiene: caricias para los que se
sienten solos, ternura para los que están enfermos, paciencia y amor para los
que le pedimos perdón una y otra vez, esperanza para los que están pasando un
mal momento, fortaleza para darle a los que sufren…Uffff tantas cosas que no
podríamos terminar hoy de nombrarlas. ¡Cómo nos gustaría tener un corazón como
el de Jesús para hacerle el bien a todos los que están cerca nuestro! ¡Vamos a
pedirle al Espíritu Santo que en Pentecostés nos regale eso!
En el nombre del Padre,
del Hijo….
·
Rezamos o cantamos la
oración sinodal para niños. (Si la querés aprender a cantar, buscala en:
http://www.vicarianiños.org.ar/musica.php cancionero N° 13 de Misa Arquidiocesana de
Niños -Un corazón como el tuyo)
Jesús, escucharte nos
llena de paz. Te podemos escuchar en la naturaleza tan hermosa; te podemos
escuchar en tu Palabra, la Biblia; te podemos escuchar en el silencio de una
oración o en la voz de quienes nos aman.
Y tu mensaje es siempre un mensaje de amor. Un mensaje de amor que
tenemos que llevar a todas las personas que no te conocen, para que ellas
también puedan escucharte y descubrirte presente en sus vidas.
En este Pentecostés
vamos a pedirle al Espíritu Santo que nos abra el corazón a nosotros y a todos
en nuestra ciudad, para que podamos escuchar el mensaje de amor de Jesús cada
día, y sobre todo para saber escuchar a quienes más necesitan de su amor.
En el nombre del Padre,
del Hijo….
A cada intención vamos
a responder: “Danos un corazón que te
escuche y escuche a los demás”
o
Por la gente que vive
en las calles de nuestra ciudad. Te decimos…
o
Por las personas que
están enfermas. Te decimos…
o
Por quienes están
tristes y sin esperanza. Te decimos…
o
Por quienes, en medio
de nuestra ciudad, se sienten solos y desamparados. Te decimos…
o
Por quienes viven
situaciones de injusticia. Te decimos…
·
Rezamos o cantamos la
oración sinodal para niños.
Jesús, queremos estar
atentos para escuchar los latidos de tu corazón que nos guían por el camino que
nos lleva a tu encuentro.
Los latidos de tu
corazón los podemos escuchar en las palabras de cada persona que nos habla de
vos y nos enseña a seguir el camino de tu amor.
Hoy le pedimos a tu
Espíritu Santo que nos ayude a estar atentos a tus latidos para seguir tu
camino.
En el nombre del Padre,
del Hijo…
Te pedimos Señor que
bendigas a todos los que con sus gestos y palabras nos enseñan tu camino.
Vamos a responder
juntos a cada petición: “Que en sus
palabras escuchemos el latido de tu corazón”
o
Bendecí con tu amor a
nuestro Papa Francisco que guía a la Iglesia en el mundo. Oremos…
o
Bendecí con tu amor a
nuestros obispos y sacerdotes, especialmente a los de nuestra arquidiócesis. Oremos…
o
Bendecí con tu ternura
a nuestros catequistas y maestros. Oremos…
o
Bendecí con tu ternura
a nuestras familias que nos aman. Oremos…
·
Rezamos o cantamos la
oración sinodal para niños.
DIA 4: “DANOS UN CORAZÓN GRANDE LLENO DE ALEGRÍA”
Nada nos llena más de alegría que una buena
noticia…¡y nosotros conocemos la MEJOR
NOTICIA DE LA HISTORIA! JESÚS NOS AMA. Tanto nos ama que murió y resucitó
para salvarnos. No hay, no hubo, ni habrá mejor noticia en el mundo.
Por eso nuestro corazón debe rebalsar de
alegría y contagiarla a los demás. No hay nada más contagioso que la alegría,
si yo estoy feliz inmediatamente quien está a mi lado comparte esa felicidad.
¡Qué lindo sería vivir en un mundo sin caras
largas, donde haya rostros sonrientes por todos lados! No es imposible, hace
falta que comencemos nosotros y contagiemos a todos!
En el nombre del Padre, del Hijo…
Espíritu Santo te pedimos que nos ayudes a
ser todos los días testigos del amor de Dios, teniendo un corazón alegre y
feliz. Un corazón que transmita esperanza y desparrame amor. Un corazón que
ayude a los demás con generosidad y ternura.
Acompañanos a llevar alegría al mundo. Amén.
·
Rezamos o cantamos la
oración sinodal para niños.
DIA
5: “DONDE ENTREN TODOS,
CON VOS Y CON MARÍA”
Hoy vamos a comenzar
directamente con esta oración, dispongamos nuestro cuerpo y nuestra mente para
rezar juntos.
En el nombre del Padre,
del Hijo…
Jesús, en tu última
cena nos pediste que amemos a TODOS como vos nos amas…a veces nos cuesta amar a
todos, amar al que me molesta, al que piensa diferente, al que no me da bolilla,
al que no es como yo. Te pedimos perdón por eso.
Pero sabemos que mañana
celebraremos PENTECOSTÉS, celebraremos la venida de tu Espíritu Santo y eso nos
llena de esperanza, porque estamos seguros de que el Espíritu Santo nos ayudará
a cambiar nuestro corazón para que podamos reconocer a todos como hijos de Dios
y así nos sea más fácil quererlos, sabiendo que todos somos hermanos.
Y si amamos a todos
como vos nos pedís, se nos meterán en el corazón. Y si nuestro corazón está
lleno de amor, seguro que vos y María habitarán en él.
·
Recemos juntos la
oración por el sínodo de nuestra ciudad de Buenos Aires, para que el Espíritu
Santo nos ayude a ir al encuentro de los demás, como Iglesia misionera.
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